Es cada vez más habitual que los estudiantes se vean en la situación de tener que compaginar trabajo y estudios. Ya sea para poder costearse su educación, apoyar a sus familias, obtener un ingreso extra para sus necesidades o simplemente para adquirir experiencia laboral, esta realidad se ha convertido en algo muy común en el entorno estudiantil, especialmente en países donde las tasas de matrícula y el costo de vida son elevados.
Aunque inicialmente puede ser un reto, combinando estudios y trabajo puede traerte múltiples ventajas y convertirse en una experiencia muy satisfactoria. Más allá de beneficiar tus finanzas, también te ayudará a ser más eficiente y autosuficiente.
Mediante una cuidadosa planificación y una firme disciplina, es posible realizar ambas actividades de manera exitosa. En este texto, te ofrecemos algunas sugerencias que pueden guiarte en tu trayectoria, para que tu esfuerzo se vea recompensado.
- Organiza tu día con cuidado. Esto es imprescindible para equilibrar tus tareas laborales y académicas. Crea un plan diario o semanal con anticipación y distribuye tus obligaciones. Aprovecha las aplicaciones y herramientas online que pueden facilitarte la gestión del tiempo, como calendarios y aplicaciones de seguimiento de actividades, para mantenerte bien organizado.
- Planifica tus actividades diarias. Cuando tienes que equilibrar responsabilidades laborales y académicas, ordenar tus prioridades es fundamental. Identificar las tareas más relevantes en tu rutina y la cantidad de tiempo que requiere cada una, te permitirá gestionar mejor tu tiempo y evitar sentirte agobiado o sobrecargado.
- Ser flexible es fundamental. Compaginar el empleo y los estudios requiere adaptarse. Organiza tus horarios para que puedas trabajar y aprender en los momentos más oportunos. En la medida de lo posible, es recomendable que tus responsables conozcan tu situación. Muchas empresas están cada vez más abiertas a la flexibilidad de horarios. Asimismo, considera opciones como el teletrabajo o la formación online, pues te pueden ayudar a ahorrar tiempo de desplazamientos, mejorar tu calidad de vida y cumplir tus objetivos de forma satisfactoria.
- Saca el máximo provecho de tus momentos de descanso. Cuando tienes diversas obligaciones, esos instantes de libertad adquieren un valor aún mayor. Dedícalos a realizar actividades que te apasionen y te permitan relajarte, desconectarte y recuperar energías para seguir cumpliendo tus responsabilidades con éxito.
- Mantén una perspectiva optimista. Una actitud constructiva es fundamental para equilibrar tus responsabilidades laborales y académicas. No te desanimes si sientes que las tareas son abrumadoras o si estás lidiando con altos niveles de tensión. Tómate un momento para descansar y recuerda que estás trabajando hacia metas significativas. Asegúrate de reconocer y celebrar cada pequeño avance.
- Asegúrate de dormir lo suficiente. Descansar adecuadamente es esencial para rendir al máximo. Mientras duermes, tu cuerpo y mente se recuperan y se preparan para enfrentar el día siguiente. La falta de sueño puede afectar tu capacidad de concentración, memoria y resolución de problemas. Se sugiere dormir entre 7 y 9 horas cada noche y mantener un patrón de sueño constante para aprovechar al máximo los beneficios del descanso.
- Mantener un cuerpo sano es fundamental. Comer bien y realizar actividad física son esenciales para tu bienestar, pero aún más importante cuando tienes una vida ocupada de trabajo y estudio, ya que demanda una gran cantidad de energía. Es crucial dedicar tiempo y esfuerzo a cuidar de tu salud física y mental para poder afrontar las exigencias diarias de manera óptima.
- Busca ayuda cuando lo necesites. Es común sentirse abrumado al estudiar y trabajar al mismo tiempo. Contar con la comprensión y el respaldo de tus redes, ya sean compañeros de trabajo, de clase, amigos o familiares, será de gran utilidad. Muchas instituciones educativas ofrecen servicios de orientación y apoyo para estudiantes trabajadores, y también existen comunidades en línea que brindan recursos y apoyo emocional. Infórmate y haz uso de los recursos disponibles para ti.
- Establece objetivos realistas y alcanzables, evitando sobrecargarte. Enfócate en las tareas prioritarias, sin preocuparte por lo que no es esencial. Aprende a decir “no” cuando sea necesario y, si puedes elegir tus clases, no te excedas en tu calendario. Mantén un equilibrio realista entre tus metas y tus capacidades, para evitar situaciones de estrés o angustia.
Combinar el trabajo y los estudios puede parecer un reto, pero es posible y puede ser beneficioso. Si eres uno de los estudiantes que tienen que equilibrar ambas responsabilidades, recuerda que estás adquiriendo habilidades y experiencia valiosas que te ayudarán a alcanzar tus objetivos a futuro. Con una planificación cuidadosa, flexibilidad y una actitud positiva, podrás manejar ambas áreas con éxito y sacar lo mejor de tu experiencia académica y profesional.
Trabajar mientras se estudia puede brindar numerosas ventajas. Además de generar ingresos para cubrir los gastos académicos, te permite poner en práctica lo aprendido en el aula y adquirir valiosa experiencia laboral. Esto te hace más competitivo en el mercado de trabajo una vez finalices tus estudios. Asimismo, el equilibrio entre trabajo y estudio fomenta el desarrollo de habilidades como la gestión del tiempo, la organización, la responsabilidad y la capacidad de adaptación, las cuales son altamente valoradas por los empleadores.
Con una planificación meticulosa, una actitud proactiva y el apoyo de familiares y amigos, podrás superar los obstáculos y sacar el máximo provecho de esta experiencia enriquecedora. Al final, habrás forjado un perfil académico y profesional sólido, con habilidades y conocimientos que te diferenciarán en el competitivo mercado laboral.

Belén Stettler es una profesional de la comunicación política oriunda de Río Gallegos, Santa Cruz, Argentina. Con un título en Ciencias de la Comunicación Social de la Universidad de Buenos Aires (UBA), ha dedicado 13 años a trabajar en diversas facetas del ámbito político en Buenos Aires. Su especialización incluye la investigación, la estrategia y la comunicación directa, así como el entrenamiento en habilidades no verbales, oratoria y coaching, dirigido a líderes y funcionarios tanto argentinos como de otros países de Latinoamérica. Ha dirigido equipos en campañas a distintos niveles de gobierno y ha ocupado puestos importantes en varias instituciones.